Moscú batió este miércoles el récord de temperatura para un 3 de julio, establecido hace 107 años, al alcanzar los 32.5 grados centígrados, según informó el director científico del Servicio Meteorológico de Rusia, Román Vilfand.
“La temperatura en Moscú alcanzó los 32.5 grados, superando por 0.3 grados el anterior récord establecido en 1917”, indicó Vilfand a la agencia rusa Interfax. La máxima histórica previa para un 3 de julio en Moscú era de 32.2 grados.
Este es el segundo día consecutivo en que Moscú registra temperaturas récord. El martes, los termómetros marcaron 32 grados, un registro que no se había alcanzado un 2 de julio desde 1890.
Los meteorólogos advierten que en los próximos días las temperaturas podrían subir aún más, llegando hasta los 35 grados. La capital rusa está experimentando una inusual ola de calor que se extenderá al menos hasta el fin de semana, cuando se espera que las temperaturas desciendan por debajo de los 30 grados, acercándose a los valores normales para esta latitud.
